Inspiradores por el mundo: Marcos de Quinto, la "Chispa" del liderazgo

Si Coca-cola fuese un país Marcos de Quinto no sería su Rey porque los reyes deben su cargo a su herencia y Marcos de Quinto se lo debe a su conquista. Ese país muy probablemente sería una isla, y también, muy probablemente, esa isla sería como la «isla del tesoro»: Y es que Marcos de Quinto no deja de repetir -cada vez que tiene ocasión- que lo mejor de Coca-cola no es que sea la marca más valorada año tras año durante años, ni que incluso el mismo nombre de la compañía sea la palabra más conocida en todo el mundo después de «OK», según de Quinto, lo mejor de la también conocida como Fábrica de la Felicidad -su tesoro- es su gente: su secreto: «somos felices porque hacemos lo que nos gusta y nos gusta lo que hacemos«.
 
De Quinto practica la «Resultadocracia», pero sabe que los buenos resultados no vienen de «hacer las cosas «porque no hay otra» sino de hacerlas «porque de verdad se cree en lo que se hace» Por eso no se ve como presidente de una empresa sino, más bien, y como él mismo dice «Me siento como el capitán de un barco pirata con una tripulación muy curiosa; cuento con un equipo de gente con mucho talento, todos son caballos pura sangre y, en ese sentido, como capitán, tengo que canalizar las energías de todos ellos contra adversarios comunes. Mi objetivo es mantener a todo este equipo sacando lo mejor de ellos con mucha energía. Para ello, uno tiene que tener las ideas claras, ser muy íntegro y muy honrado, la gente sigue a las personas con ideas claras, que mantienen posturas valientes respecto a lo que hay que hacer y que tienen un sentido de la integridad con los equipos» De Quinto prefiere motivar a obligar y es tan fiel a su producto que no falto de humor dice que nunca bebe calimocho, pero no por no estropear el vino, sino por no estropear la Coca-cola.
El presidente de Coca cola tiene un puesto de honor en mi lista de personas inspiradoras para recibir el libro porque no sólo ha conquistado la mayoría de rankings de marketing, publicidad y gestión, sino porque, sobre todo, ha conquistado a sus trabajadores o como él prefiere llamarlos a sus compañeros de equipo y es que Marcos ha sido la única persona de todas las que me han propuesto para formar parte de la lista  (y no han sido pocas) que ha sido propuesta por una persona de su propio equipo. La única. Y es que parece ser que hay dos tipos de jefes: a los que admiras y a los que obedeces, y por lo visto, de Quinto pertenece a los primeros.
 
Algún amigo suyo le ha definido como «empresario irreverente» y le gusta mucho esa definición ya que de alguna forma «reverencia la irreverencia» puesto que desde su punto de vista sólo se evoluciona cuando alguien se replantea la forma de hacer o entender las cosas, es decir «a golpe de irreverencia»
 
Pero Marcos es admirado dentro y fuera de su empresa y él mismo encuentra parte de su éxito en su voluntad de escuchar. Y es que muchos profesionales quieren adivinar el gusto de sus consumidores y al hacerlo, como no son telepáticos, sus esfuerzos se vuelven «telepatéticos», De Quinto es más bien tel(e)mpático, no pretende adivinar nada, no lee las mentes de nadie pero en cambio sí lee los pensamientos de muchos en sus timeline de Twitter. Y es que al contrario que otros muchos personajes reconocidos que usan Twitter para «decir», Marcos lo usa para «decir» y para «que le digan». Contesta a todos sobre cualquier tema y curiosamente en su biografía tuitera también se define como: Pirata. Navego sin bandera. No pretendo convencerte de nada acaso dudar de lo que sabes.

Marcos defiende su libertad de pensamiento y de opinión cada vez que alguno se sorprende que alguien con ese cargo diga libremente lo que opina ante cualquier situación como un ciudadano más, porque, además de presidente de Coca-cola, es persona y como tal libre de expresar su opinión.
Lástima que a Coca-cola no le de por poner en sus lata frases suyas como en los sobrecitos de azúcar porque entre sorbo y sorbo podríamos leer perlas como esta:

Decir lo que uno piensa puede hacernos perder a algunos amigos; callarlo puede hacer que nos perdamos a nosotros mismos.

Ya lo dijo Espronceda:

 
Que es mi barco mi tesoro,
que es mi dios la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria, la mar.
 
Y es que la palabra pirata etimológicamente proviene de un verbo griego que significa intentar fortuna en la aventura, y de Quinto es aventurero y afortunado, pero sobre todo, como buen pirata, siempre es fiel así mismo, aunque su humildad hace que esconda su coherencia en  algo así como en un «ahorro de energía» pues defiende que  «es menos complicado ser la misma persona en todo momento (en el trabajo, con los amigos, en mi vida personal…) que adoptar personalidades en las que uno nunca acaba sintiéndose cómodo del todo«
 
El actual presidente de Coca cola Iberia tras 30 años en la compañía asegura que lo mejor de su trayectoria profesional es haber conocido a las personas que ha conocido y que el secreto de Coca cola no está en su fórmula sino en su gente. Su actitud nos enseña que hay personas que se hacen grandes haciendo grandes a los demás. 

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